Y un día Miguel Mateos volvió a tocar en el Luna Park, y fue 25 años después de la última vez que lo hizo. Y otra vez se volvió a llenar (hubo entradas agotadas) aunque esta vez la gente era otra gente, o era la misma, pero con 25 años encima, y nadie sigue siendo el mismo con 25 años en encima.
A los 55, Mateos exprimió cada uno de esos hits adheridos (a esta altura parece que adheridos para siempre) al sonido de los ochenta y completó un show de tres horas a dos bandas: la que tiene con sus músicos actuales y la que tuvo aquella vez, con el interminable Chino Sanz en guitarra y Oscar Kreimer en el saxo, y que se llamó Zas, recordarán. Y ese batero que es su sombra inacabable, Alejandro Mateos, su hermano, formando parte de ambas.
Arrancó con "Por una noche más" y sus rockas vivas y desde allí fue desgranando su cancionero pop new wave roquito hitero: "Perdiendo el control", "Va por vos", "Dulce Ana". En el medio de la noche, Mateos desapareció del escenario y apareció en la consola de sonido, donde tenía dispuesto su teclado. Desde allí arrancó cantando: "Yo, caminaré entre las piedras...". El Luna Park se puso de pie y Mateos concluyó: "¡Fuerza Gustavo!". Después tocó "Mundo feliz".
Miguel Mateos tiene una de esas carreras que hay que ponerse a explicar: debutó en la cima, teloneando a Queen en el show de Vélez de 1980, y ahí arriba se mantuvo durante casi toda la década. Rockas vivas es el disco en vivo más vendido en la historia del rock argentino y todos los que andamos por los cuarenta nos hemos cruzado con sus canciones. Luego vino el reverso de esa vida en las cumbres, una especie de desaparición. Siempre hubo un nuevo disco de Mateos por ahí dando vueltas, pero algo había cambiado para siempre. El show de anoche, tuvo esa partición: la segunda mitad, lo tuvo haciendo sus canciones post rockas vivas: "Sin pensar", "Alas", "Bar imperio", "Atado a un sentimiento" y aquel accidente techno noventoso que se llamó "Obsesión" y del que el propio Mateos parece tener conciencia: "Esta canción la escribí para romper las bolas", se sinceró.
El final, como todos imaginamos, fue con "Tirá para arriba", una de esas canciones que por adherencia y perdurabilidad, están más allá de la crítica: ¿qué podemos decir? ¿Que es fantástica, que es un bodrio? Ya no vamos a librarnos de "Tirá para arriba", y a esta altura tal vez ni siquiera lo deseemos. De las cosas que persisten y se quedan uno se va haciendo amigo. Y ella va a seguir estando allí, un poco para siempre.
Lista de temas:
Por una noche más
Peleando por tu amor
Perdiendo el control
Va por vos, para vos
Dulce Ana
Bulldog
Tengo que parar / Mensajes en la radio / Tómame
Mundo feliz
Un poco de satisfacción
Extra, extra
Un gato en la ciudad
Huevos
Mi sombra en la pared
Y sin pensar
Alas
Es tan fácil romper un corazón
Beso francés
Bar imperio
Rockeando
El jardín de amor
Atado a un sentimiento
Cuando seas grande
Obsesión
Tirá para arriba
Por Alejandro Seselovsky
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