El International Board (IB), organismo que dicta las reglas universales del fútbol, aprobó el uso de la tecnología para asistir a los árbitros. Pero se utilizará solamente para determinar si la pelota ingresa o no en el arco, según informó la FIFA. La novedad consiste en la utilización de un dispositivo electrónico que generará una respuesta inmediata al árbitro.
Tras reunirse en Cardiff por su sesión anual de trabajo, el IB dio una serie de pautas. Las empresas interesadas en participar de esta nueva experiencia tendrán tiempo hasta fines de noviembre para presentar su proyecto ante la FIFA. El mismo contará con un sistema de detección en la línea del arco y una de las exigencias es que se confirme en menos de un segundo si el balón traspasó o no completamente la línea de gol. En este caso no se mostrarán imágenes dentro del campo de juego ni serán visibles al público en el estadio. La información será comunicada exclusivamente al árbitro, a diferencia de lo que sucede en otros deportes como el tenis, cuando se utiliza el “Ojo de halcón” para determinar el pique de una pelota dudosa. El rugby y el hockey sobre césped también usan la tecnología para jugadas dudosas.
El ente indicó que probará los prototipos presentados y analizará los resultados en su reunión del 4 al 6 de marzo, en la que se podrán cambiar de manera concreta las reglas del juego. Además, el IB anunció que no se tomarán en cuenta tecnologías para analizar sistemas que, por ejemplo, confirmen si la pelota salió del campo en otro sector de la cancha.
La Junta General Ordinaria del IB también debatió sobre los ocho experimentos con árbitros asistentes adicionales que se aprobó en julio con la intención de ayudar al árbitro en jugadas que se desarrollan dentro del área. La Unión Europea de Asociaciones de Fútbol y las asociaciones de Francia, Marruecos y Qatar realizan actualmente esos ensayos y las de México, Costa de Marfil y Brasil los pondrán en marcha en 2011.
El debate sobre el uso de ayudas tecnológicas al arbitraje se relanzó tras los groseros errores cometidos durante el Mundial de Sudáfrica. Uno de ellos se produjo en el encuentro de los octavos de final de Alemania-Inglaterra cuando el referí uruguayo Jorge Larrionda no convalidó un gol legítimo del inglés Frank Lampard cuando su equipo perdía por la mínima diferencia. De esta manera la FIFA decidió reanudar las discusiones sobre una cuestión muy resistida en los últimos tiempos por su propio presidente Joseph Blatter.
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