lunes, 6 de mayo de 2013

"ESTAR EN RAMONES SALVO SU VIDA"

Entrevista a Mickey Leigh. El hermano de Joey y productor de sus discos póstumos, se sincera.”El nunca tiró la toalla, luchó como un campeón”.
 
Por Pablo Raimondi
 
Aunque tuvimos grandes peleas y no nos hablamos durante un tiempo, hasta 1991 fuimos los mejores amigos que podíamos ser”. Preocupados por temas sociales, la guerra, el imperialismo, a Joey Ramone y su hermano Mickey Leigh los unía un solo objetivo: la paz, iban juntos a las marchas, colaboraban por la causa. Pero cuando crecieron, todo cambió.
En el libro I Slept With Joey Ramone, escrito por Mickey junto a Leggs McNeil, se habla sobre esas transformaciones. “Cuando éramos chicos y veíamos una película de miedo yo saltaba a su cama buscando estar seguro. Pero luego crecí y él siguió siendo muy alto y delgado. La gente lo burlaba. Hice lo mejor que pude para tratar de protegerlo”, le cuenta Leigh al Sí!
Mickey, aparte de su rol de biógrafo familiar, produjo los dos discos póstumos de Joey: Don´t Worry About Me y el reciente Ya Know? “El último es mucho más diverso que el anterior. No quería un título simple para el disco así que traté de buscar algo cercano a la personalidad de Joey y un día me textearon “Ya know” y pensé: “¡esto es perfecto para el disco!”.
Cuando a Mickey se le pregunta acerca de su colaboración con Ramones, se entusiasma y hace escuchar a través del teléfono la canción It’s Not My Place (In the 9 to 5 World, del disco Pleasant Dreams. “Escribí toda la música, esa canción es mi mayor contribución”, agrega quien junto a Joey creó en 1994 el grupo Sibling Rivalry y grabaron el EP In A Family Way. Quizás esos datos sean desconocidos por muchos, pero lo tristemente célebre fue la distancia entre Joey y Johnny, las dos figuras más importantes del ícono punk estadounidense: estuvieron sin dirigirse la palabra por más de 20 años, hasta que el grupo se separó. Y Mickey entrega un dato revelador. “Desafortunadamente fui la persona que tuvo que decirle a mi hermano lo de su novia Linda (se fue con el guitarrista y luego se casó), nadie quería hacerlo y odiaba ver cómo le tomaban el pelo. Sabía que se iba a enojar conmigo... viste, eso de matar al mensajero”.
 
–¿El te hablaba sobre el tema?
–No era algo que saliera mucho en las conversaciones, pensábamos en la cosa horrible que había pasado y que Johnny ni siquiera se disculpó con Joey, por lo menos decirle, “no hice esto a propósito, simplemente pasó”, pudo haberlo hecho, pero nunca más se hablaron.
 
–¿Seguiste en contacto con Johnny tras la muerte de Joey?
–Todo Ramones estaba a cargo de ellos dos, así que cuando mi hermano murió, parte de la responsabilidad de llevar adelante el negocio fue mía. A pesar de que el dinero fue a mi madre yo tenía que manejar la cosas. Así que en ese punto, éramos compañeros con Johnny, y hubo muchos sentimientos cruzados: lo conocí al tener 10 años porque un amigo mío tenía un hermano mayor que estaba con Johnny en una banda, luego entré a ese grupo y él me dio su guitarra. Fue mi mejor amigo entre los 14 y los 17 años pero después me decepcionó. Es una larga historia.
 
–¿Y tu relación con Dee Dee?
-Esa sí que era buena, con él escribí la canción Go Home Ann, (NdR: está en el lado B del 12” Bonzo Goes To Bitburg, de 1985). Escribimos seis o siete canciones juntos. Nuestra relación era buena hasta que las drogas lo alejaron.
 
–¿Cómo es hoy tu relación con el resto de los Ramones?
–Richie y yo somos grandes amigos, a Tommy lo conozco desde que tengo 10 años, es gran parte de mi vida. Sin embargo Marky es muy cambiante, tener una buena relación con él es bastante difícil.
 
–¿Por qué Joey siguió cantando a pesar de su enfermedad?
–Porque no había razones para parar, cuando estás así ¿qué vas a hacer con tu tiempo?: lo que más amás, y eso fue lo que él hizo, nada le podía dar más placer. Pero ojo, no siempre estaba débil, a veces se sentía bien. Pocos meses antes de morir le estaba yendo muy bien con la medicación.
 
–A 12 años de la muerte de tu hermano, ¿cómo te sentís?
–Lo extraño mucho, no puedo evitar tenerlo en mi cabeza. Recuerdo sus últimos días, gritos de dolor, apretando mi mano cada vez más fuerte. Yo sentándome junto a su cama, sintiendo que no podía ayudarlo, viéndolo ponerse peor y peor. Pero él nunca tiró la toalla, luchó como un campeón.
 
–Dee Dee dijo en el documental “End Of The Century” que los Ramones le salvaron la vida, ¿sucedió lo mismo con Joey?
–Sí, es algo duro para asumir pero pienso que estar en Ramones salvó su vida. No sé realmente en qué se hubiera podido convertir.
 
Fuente: Suplemento Si!

No hay comentarios:

Publicar un comentario