778 personas recibieron asistencia del programa creado para los juicios por delitos de lesa humanidad. El balance del programa Verdad y Justicia revela que intervino en 72 juicios por la extensión del servicio a todo el país.
Por Gimena Fuertes
El programa Verdad y Justicia, organismo encargado de garantizar la contención y protección de los testigos, víctimas y funcionarios judiciales que intervienen en las causas por delitos de lesa humanidad, realizó un informe, al que tuvo acceso Tiempo Argentino, en el que detalló que durante 2011 asistió a 778 personas que aportaron su testimonio a la justicia. A su vez, el documento que resume la tarea realizada durante el año pasado, destaca que el programa intervino en 72 juicios por delitos de lesa humanidad y realizó 2537 análisis de riesgos sobre testigos. Otro de los logros que destacan desde el programa fue que en diciembre pudieron dar con el paradero del represor prófugo, Ramón Warfi Herrera, que fue jefe de policía de Santiago del Estero, desde enero de 1977 hasta 1979, y tenía a su cargo al represor santiagueño Musa Azar. La detención de Warfi Herrera, que se produjo el 16 de diciembre pasado, se logró después de que el represor permaneciera prófugo durante dos años. A partir de su captura, el juez Guillermo Molinari lo procesó a fines de diciembre por desaparición forzada, homicidio calificado y torturas en diez casos.A su vez, el documento de balance del programa destaca que durante 2011 extendió la atención de testigos a casi todo el país, ya que hasta hace un año sólo trabajaba en la Ciudad y la provincia de Buenos Aires. “Ahora sí estamos presentes en casi todo el país, faltan algunos lugares todavía, como la Patagonia. Antes se intentaba hacer el trabajo de protección y contención con el personal del programa desde Buenos Aires y era casi imposible porque la presencia en el interior era testimonial. En 2011 asignamos abogados por jurisdicción, aunque algunas cubren varias provincias. Cada año hay más juicios, en 2010 aumentaron y en 2011 hubo una explosión, y para este año se prevé que serán aun más. Incluso, si no hay más juicios es por la falta de jueces. De hecho, gracias a la expansión del programa, el año pasado pudimos llegar a Bahía Blanca y allí asistimos a 250 testigos del megajuicio”, explicó el coordinador del programa, Guillermo Valera. En total son 12 las causas por delitos de lesa humanidad en las que el programa intervino al presentar informes de evaluación de riesgo de testigos durante el año pasado. A su vez, otra de las funciones más importantes del programa es la entrega en forma personal de las notificaciones de los juzgados a los testigos, quienes muchas veces son las víctimas directas o familiares de las víctimas. “Se les hace una introducción sobre las formalidades del juicio al que aportarán su testimonio y se los contacta con un programa de asistencia psicológica. También acompañamos a los testigos el día del juicio, y seguimos en contacto después de que termina el proceso judicial”, relató Valera. “Es un tipo de trabajo que no se podía hacer desde Buenos Aires sino que era necesario estar presente en la zona, por eso el programa ahora existe y los testigos tienen la conciencia de estar siendo asistidos por el Poder Ejecutivo”, agregó el coordinador del programa que depende del Ministerio de Justicia y Derechos Humanos. Valera evaluó que “en la mayor parte del país el Poder Judicial apoya que estos juicios por delitos de lesa humanidad se lleven a cabo, pero hay lugares como Jujuy donde no hay ninguna duda de que la intención del Poder Judicial es la de bloquearlos para que no se desarrollen nunca, tal como sucedía en Mendoza con los ex magistrados Otilio Romano y Luis Miret”, se quejó Valera. <
No hay comentarios:
Publicar un comentario